La fresadora CNC es una máquina que se emplea en la actualidad para diferentes trabajos de mecanizado en fábricas, talleres y todo tipo de sectores industriales. El funcionamiento de esta maquinaria se desarrolla a través del proceso de arranque de viruta. En dicho proceso, la máquina emplea una serie de cuchillas o herramientas de corte, denominadas fresas, que van arrancando la viruta de la pieza que se halla en un movimiento de rotación.
En función del tipo de movimiento a emplear, podemos encontrarnos con fresadoras CNC verticales u horizontales. El operario controla y dirige cada una de estas máquinas por medio de un ordenador. De esta forma, se consiguen unos resultados mucho más precisos y exactos con la pieza en cuestión.
El funcionamiento de la fresadora CNC
Una fresadora CNC convencional dispone de una mesa, un cabezal de corte, el husillo y un carro de desplazamiento lateral y transversal. Además, viene también con un panel de control CNC, unas mangueras para suministrar a la máquina el líquido refrigerante, dos ejes para el desplazamiento y otros dos para el cabezal de corte.
A través del panel de control CNC, el trabajador puede controlar y programar los distintos movimientos y desplazamiento de la mesa que puede realizar la fresadora. Los programas que suele incluir una fresadora CNC son los siguientes:
- Diseño asistido por ordenador (CAD), ideal para diseñar la pieza con la que se va a trabajar.
- Manufactura asistida por ordenador (CAM), calcula los desplazamientos de la máquina y la velocidad de giro de las fresas para el corte de la pieza.
- Software de control.
Una vez que el operario programa el diseño y el corte de la pieza, la máquina ejecuta el trabajo. El operario ni tan siquiera tendrá que intervenir en el proceso de mecanizado. Así se obtiene una mayor productividad, precisión, seguridad, rapidez y flexibilidad en el fresado.
Aplicaciones de fresadora CNC
Una fresadora CNC puede tener múltiples aplicaciones en diferentes sectores industriales. Esta máquina se puede emplear en diversos talleres y fábricas, ya que ofrece unos resultados muy precisos y brinda una productividad mucho más elevada con respecto a las fresadoras convencionales u otras herramientas manuales.
En el sector aeronáutico, por ejemplo, se emplea para la fabricación de trenes de aterrizaje, turbinas y una gran cantidad de componentes del fuselaje del avión. Por su parte, en el sector eólico es la opción perfecta para la fabricación de bujes y rotores, mientras que en el sistema ferroviario también se emplea para el diseño de agujas, cruzamientos, bastidores y otros elementos estructurales de los trenes.
Dentro del sector hidroeléctrico, la fresadora CNC realiza un importante trabajo en la fabricación de turbinas. En los últimos años, también se ha incorporado el uso de fresadoras CNC para grandes piezas de mecanizado. Su aplicación para la fabricación de máquinas de columna móvil, máquinas puentes y demás ha permitido un gran avance en muchos sectores.
Hay que destacar la presencia de esta máquina en los sectores de envasado y embotellado, en la fabricación de suministros industriales y líneas de montaje, trabajos de arquitectura e interiorismo, carpintería, automoción y calderería plástica.
Los materiales que se pueden utilizar en los procesos de fresado son muy diversos. Acero inoxidable, aluminios compuestos u otros metales suelen ser los más habituales. Pero también se pueden fresar resinas, composites, fibras de carbono, espumas, maderas y plásticos técnicos como el polietileno.
Ventajas de uso de este tipo de fresadoras
El trabajo mecanizado de la fresadora CNC permite obtener un corte y unas medidas de las piezas muy exacto y preciso. De hecho, se suelen crear piezas hechas al milímetro y con riesgo de error cero. Gracias al sistema de control numérico por computadora (CNC), se logra programar con antelación todo lo relativo al corte, el dibujo y la lija de la pieza.
Además, la fresadora CNC puede realizar en muy poco tiempo y de la manera más sencilla y precisa trabajos que resultan muy complejos. El operario solo tendrá que configurar el programa y supervisar que el fresado se produce de la manera establecida. Así, no solo se obtiene una mayor precisión, sino también una mayor productividad para la empresa.
El hecho de que el trabajador sólo tenga que programar el tipo de fresado hace que no tenga que manipular la máquina cuando esta se halla en movimiento. Se trata, por tanto, de un método de trabajo muy sencillo y seguro. Los riesgos de accidente con una fresadora CNC son mínimos para cualquier persona que trabaje con esta herramienta.
Por último, la fresadora CNC es una máquina que apenas genera residuos de metal. Las fresadoras actuales incorporan un proceso de corte y/o mecanizado que se encarga también de los elementos resultantes. De esta manera, el entorno de trabajo queda completamente limpio, lo que supone una mayor comodidad para trabajar y unos mejores resultados en el menor tiempo.