El torneado de madera es un proceso de mecanizado en el que se talla un objeto o pieza utilizando una máquina herramienta llamada torno. El torno hace girar la pieza a gran velocidad, mientras las herramientas de corte se acercan a la superficie de la misma para darle forma y eliminar el material sobrante.
Torno para madera
Puede decirse que el torno para madera fue el primer torno que se inventó en la antigüedad. A partir de esta rudimentaria máquina herramienta fueron surgiendo los distintos tornos que conocemos hoy en día y que están adaptados para trabajar con metales y otros materiales. El torneado en madera no se coloca directamente dentro de la categoría de carpintería, puesto que no lo realiza un carpintero sino un tornero.
Esta máquina herramienta está compuesta por un cabezal que es el encargado de mover a la pieza de madera, gracias a la unidad de avance con poleas. Además, el torno para madera cuenta con una bancada que da estabilidad a la herramienta y guías que permiten el desplazamiento. Este desplazamiento se realiza a través de un carro, que tiene dos movimientos: axial y transversal. El contrapunto es la parte del torno que alberga al cabezal y que sirve para soportar un extremo de la pieza a mecanizar.
Por último, esta máquina herramienta está equipada con un interruptor de encendido y controles de velocidad que permiten regular la velocidad de corte (efectuada por el cabezal) y la velocidad de avance (ejecutada por la pieza al desplazarse).
El torno y la madera
Para que los resultados del torneado sean los deseados, es importante escoger la madera adecuada. Para ello es necesario tener en cuenta las características y el uso que se le dará a la pieza final y, por supuesto, considerar las características de la madera. Y es que el torno para madera es capaz de crear piezas de lo más variadas, incluso bates de béisbol.
Dentro de las maderas más trabajadas en esta máquina herramienta se encuentran las maderas blandas y duras. Dentro de las maderas blandas encontramos la de pino; esta se caracteriza por ser abundante, económica y muy versátil. En las maderas duras, que son un poco más difíciles de trabajar, destacan el roble, el nogal, el ébano, el olivo y la caoba; cada una de estas maderas tiene sus propias características, grados de dureza, colores, fibras, etcétera.
Es importante destacar que las maderas blandas son las más aconsejables para las personas que están iniciándose en el mundo del torneado de madera; no solo porque la madera es más suave, sino porque también es más económica.
¿Qué es la mordaza para torno de madera?
Para que el torno pueda funcionar como es debido no solo hace falta regular las velocidades de corte y avance, las revoluciones por minuto, la profundidad de corte en torno o escoger las herramientas adecuadas para el mecanizado; tampoco es suficiente con conocer el diseño de la pieza y las características de la misma. Es necesario contar también con un buen sistema de amarre que ayude a que la pieza se mantenga fija mientras se realiza el mecanizado.
Uno de estos sistemas de amarre es la mordaza. Los tornos se caracterizan porque la pieza a mecanizar gira sobre su propio eje, mientras realiza el movimiento de avance y se encuentra con las herramientas de corte. Para que pueda girar a gran velocidad, es necesario que la pieza esté bien sujeta y no se deslice ni cambie la posición en la que se le ha colocado. Esto se consigue a través de los sistemas de amarre como la mordaza.
¿Cuál es la importancia de la mordaza para torno de madera? Además de sujetar a la pieza como es debido, una mordaza garantiza trabajos muy precisos y de calidad, pero también aporta mayor comodidad y seguridad para los operarios.
La mordaza es una de las herramientas del torno que, a través de un mecanismo de husillo, permite la sujeción por fricción de la pieza, mientras ejerce presión constante sobre la misma. Hoy en día es posible encontrar distintos tipos de mordaza que varían según la máquina herramienta. Existen, por ejemplo, mordaza de base fija o giratoria. Las giratorias pueden accionarse por mecanismos manuales, hidráulicos o mecánicos y suelen colocarse sobre un plato circular.
Tipos de mordazas
Además de la clasificación de mordazas fijas o giratorias, destacan tres tipos que son los más comunes en la industria:
- Mordaza de tornillo: es la más habitual y es posible encontrarla en distintos tamaños y materiales, siendo de metal o madera las más comunes.
- Avance fijo-progresiva: se caracteriza porque cuenta con una llave que permite ajustarla con facilidad.
- Mordaza de pinzas: empleada para ejercer presión sobre pequeños objetos.